A T E N C I O N


El blog no se ha creado con la finalidad de tomar decisiones por, ni en representación de ningún cliente.



Estimados clientes para que el blog siga funcionando necesitamos su contribución, done.

BIENVENIDOS CLIENTES DE ECONOINVEST CASA DE BOLSA QUIENES SE HAN GUIADO CON LAS NOTICIAS DE ESTE BLOG Y ESTARAN PARTICIPANDO EN UNA SERIE DE REUNIONES PARA EXIGIR SUS PAGOS Y JUSTA LIQUIDACION.

Twitter

Buscar este blog

sábado, 4 de septiembre de 2010

El colapso del Mercado de Capitales comienza con U21




De Como a partir de U21 liquidaron el mercado de capitales
Septiembre 3, 2010 7:24 pm (Especial lapatilla.com)

En apenas meses ha desaparecido el hasta entonces pujante, mercado de capitales de Venezuela. No por el número de empresas que transaran públicamente instrumentos de renta variable o fija, sino que por diseño de políticas públicas se utilizó para la colocación de bonos emitidos por el gobierno nacional y como aliviadero para un mercado de divisas controlado. Y eran enormes los volúmenes que por ahí pasaban.

Parte I:
Caso U21 y sus efectos El Banco Canarias y U21 Casa de Bolsa, pertenecientes al Grupo Financiero Canarias, eran operadores profesionales del sector financiero y del mercado de capitales, por lo que sus actividades estaban reguladas por la Ley General de Bancos y la Ley de Mercado de Capitales, respectivamente, y por ende estaban sometidas a la supervisión de la Superintendencia de Bancos (Sudeban), en el caso del primero, y la Comisión Nacional de Valores (CNV), en el caso del segundo. Por consiguiente, hasta el 19 de noviembre de 2009, fecha en que se decreta la intervención del grupo, ni los otros operadores del mercado, ni el público en general, podían suponer algún tipo de incumplimiento de las obligaciones contraídas por este grupo financiero.

Durante 2009, U21 Casa de Bolsa solicitó préstamos (mutuos activos) a diversas casas de bolsa, tanto en dólares americanos como en bolívares, mediante títulos emitidos por la República Bolivariana de Venezuela (TICC), y a su vez diversas casas de bolsa obtenían en préstamo dichos TICC, mediante operaciones de mutuo pasivo en las cuales el Banco Canarias les daba en préstamo los títulos, y por esa intermediación financiera, las casas de bolsa obtenían un 3% de interés anual.

A partir de la intervención del grupo Canarias, U21 Casa de Bolsa dejó de pagar sus obligaciones, lo cual resultó sorpresivo para las casas de bolsa, no sólo porque (por la magnitud de sus operaciones) era considerada la segunda institución de su género en el país, sino porque estando sujeta a las regulaciones y controles estatales, nada hacía prever que su situación patrimonial estuviese comprometida.

Esta intervención permitió conocer dos hechos significativos: que el Banco Canarias estaba sometido a un régimen de veeduría, lo que significaba que sus operaciones no sólo eran del conocimiento previo de la Sudeban, sino que estaban sujetas a objeciones e incluso órdenes de reversión, por una parte; y por la otra, que aparentemente las empresas del Grupo Financiero Canarias “compartían una misma tesorería” de manera que actuaban bajo una misma unidad de propósito. Ambas circunstancias, ajenas al público y a los demás operadores financieros, agravaron los incumplimientos de U21 Casa de Bolsa, debido a que suponen una burla a la buena fe de todo aquel que contratase con esta institución en desconocimiento de su situación patrimonial, la cual era del pleno conocimiento de las autoridades del área.

Estos hechos añaden razones a la circunstancia de que las operaciones de mutuo activo y mutuo pasivo celebradas por las casa de bolsa fueron realizadas con un mismo grupo financiero cuyos entes actuaban entre sí con unidad de designio y donde, por causa del mismo procedimiento de intervención, quedó perfeccionada la figura de la confusión entre el deudor y el acreedor en relación con dichas operaciones. Ante estos supuestos, las casas de bolsa afectadas invocaron ante la Junta Interventora de U21 Casa de Bolsa y las autoridades de la CNV, la compensación de mutuo pasivo y el mutuo activo celebrados de buena fe con U21 Casa de Bolsa C.A. y Banco Canarias, respectivamente. Sin embargo, esta última les ordenó registrar de manera inmediata en sus respectivos balances la totalidad de las pérdidas sufridas por el incumplimiento en el que había incurrido U21 Casa de Bolsa C.A. apenas 21 días atrás. Los detalles y circunstancias de esta orden merecen especial atención por lo siguiente:

Esta orden, que contenía una resolución dictada por el Presidente de la CNV y no por el Directorio del organismo, declaraba anticipadamente, en términos definitivos, “la posibilidad cierta de la no recuperabilidad de los recursos correspondientes a las operaciones realizadas”, lo cual suponía la irreversibilidad de la situación en los balances, tanto en las casas de bolsa afectadas (negativo) como de U21 Casa de Bolsa (positivo), haciendo inútil cualquier gestión administrativa o judicial tendiente a procurar la recuperación total o parcial del monto de la acreencia.

Por otra parte, se conminó a las casas de bolsa a registrar la totalidad de las pérdidas, sin posibilidad de diferimiento, en un lapso de 48 horas y a indicar la “forma en que efectivamente será subsanada la situación” dentro del lapso de 5 días; es decir, se les ordenó que renunciaran a cualquier gestión de cobro contra U21 Casa de Bolsa, C.A. o de compensación de los mutuos con el Grupo Financiero Canarias, dentro del primer mes de producido el incumplimiento.

El informe donde constase el acatamiento de estas órdenes debía presentarse “directamente a la Presidencia de la Comisión Nacional de Valores, en sobre cerrado, con carácter confidencial”, no al Directorio de la institución. (Ver copia al final del reporte)

Las casas de bolsa acataron la orden, pero algunas lo hicieron sin renunciar a su derecho de invocar la compensación y ejercer acciones de cobro o de formar parte del concurso de acreedores de U21 Casa de Bolsa, por lo que presentaron ante la CNV (de forma confidencial, como fue requerido) un plan de recuperación a tres años, convencidos de que éste era un período razonable para establecer la posibilidad de recuperar los recursos adeudados luego de evaluados los resultados de las acciones y medidas adoptadas por las autoridades competentes.

En enero de 2010, la presidencia del CNV anunció verbalmente a las casas de bolsa que dicho plan, presentado el diciembre anterior, había sido rechazado, ya que consideraba imprescindible que la pérdida quedara registrada de manera irreversible dentro del ejercicio económico que concluyó el 31 de diciembre de 2009.

Este procedimiento produciría un impacto favorable en los estados financieros de U21 Casa de Bolsa, cuyos accionistas se verían favorecidos con la súbita desaparición de sus acreencias, además de la eventual cobranza de lo adeudado por ellos mismos.

En ese mismo mes, la presidencia de la CNV ordenó a las casas de bolsa suspender operaciones, sin que ocurriese ninguna circunstancia que supusiera (entre otras cosas, por el brevísimo lapso entre una orden y otra) agravamiento de los índices patrimoniales de estas instituciones, como consecuencia del incumplimiento de U21 Casa de Bolsa con las obligaciones contraídas. Esta orden se mantendría hasta que se solventase la situación patrimonial; es decir que entregados los planes de capitalización en términos que garantizaban lo requerido de forma inmediata, quedaba cumplida la condición para la restitución de operaciones, por lo que algunas casas de bolsa procedieron a materializar el compromiso anunciado mediante la celebración de Asambleas, reponiendo las pérdidas en efectivo y consignando los soportes que acreditaban estos aportes. A pesar de ello, algunas casas de bolsa fueron objeto de intervención por parte del directorio de la CNV, en unos casos incluso con cese de operaciones.

Esta decisión resultó injusta porque se acordó en el curso de la instrumentalización de los correctivos para subsanar la deficiencia en su índice de capitalización, lo cual era del conocimiento de la CNV, ya que se le notificó formalmente no sólo en la intención de hacer el aporte de capital sino en la disponibilidad del monto de éste en las cuentas que las casas de bolsa mantienen en el BCV. Por otra parte se soslayaba el hecho de que la deficiencia en el índice de capitalización se debía, no a la gestión operativa de las casas de bolsa, sino al incumplimiento de una obligación contraída por U21 Casa de Bolsa con estas, además de desechar a priori cualquier solución destinada a exigirle al grupo Canarias el pago o compensación de la obligación cuyo incumplimiento constituye el único elemento de distorsión en los estados financieros de las casas de bolsa.

Durante el proceso de intervención del primer grupo de casas de bolsa, los interventores tuvieron pleno acceso a los registros y documentos de las instituciones, y realizaron exhaustivas revisiones de las operaciones sin que se haya informado de la existencia de irregularidad alguna que convalide el proceso de intervención. Incluso existen Informes Definitivos presentados por algunos interventores, que recomiendan el levantamiento de dichas medidas de intervención, toda vez que cesaron las causas que las motivaron, ya que los accionistas repusieron las pérdidas sufridas por el incumplimiento de U21. Sin embargo, la presidencia de la CNV, no sólo persistió en su decisión, sino que ordenó la liquidación de algunas de estas casas de bolsa.

Parte II:
Nuevas intervenciones Bajo la “excusa” de que las casas de bolsa eran culpables de la fuerte subida del dólar paralelo, la CNV inició en abril de este año una cacería de brujas en contra del sistema de mercado de capitales, utilizando a la Fiscalía como instrumento de sus designios. Se efectuaron allanamientos, se intervinieron decenas de casas de bolsa, se detuvieron a varios directivos de instituciones financieras y, en tiempo record, se ha anunciado la liquidación de varias de ellas. El supuesto delito imputado a los directivos detenidos es el de Ilícitos Cambiarios, sustentando tal acusación en que, según esto, las operaciones de permuta de los denominados TICC constituían de por sí un ilícito cambiario, ignorando que existe una resolución del BCV del año 2009, donde específicamente se permite las operaciones con TICC tanto en bolívares como en dólares.

Vale la pena destacar, en cambio, que desde que comenzaron las intervenciones, en mayo pasado, no ha habido una sola acusación sobre mal uso de los dineros públicos, desfalco o aprovechamiento, mientras que al contrario, las informaciones publicadas por la CNV indican que los portafolios del público están plenamente garantizados por el patrimonio de las casas de bolsa. Lo cual parece indicar que la cacería contra estas empresas parece ser una cortina de humo para distraer lo ocurrido en otras instituciones.

Parte III:
Consideraciones Generales La información emanada de la propia Junta Interventora de U21 Casa de Bolsa (la cual luego fue destituida), indica que gracias a sus gestiones esa institución tiene suficiente patrimonio para pagar a sus acreedores en un altísimo porcentaje. Sin embargo, al ser consultada al respecto, la CNV ha negado sistemáticamente este hecho, negando información a los interesados. ¿Por qué la CNV se niega a pagar a los acreedores de U21 Casa de Bolsa? Porque si paga a las casas de bolsa que son sus principales acreedores, quedaría al descubierto la arbitrariedad de haber intervenido y liquidado algunas de esas instituciones.

También es sabido que los interventores que han presentado informes recomendando levantamiento de medidas y rehabilitación de instituciones, o que se han negado a ejecutar las órdenes emitidas de la CNV, han sido destituidos. Al contrario, los interventores incondicionales a la Presidencia de la CNV, que han procedido con la arbitrariedad que se espera de ellos, se han aumentado los sueldos con sumas exorbitantes, como el caso de la Nahunimar Castillo, interventora de Econoinvest, que se fijó un sueldo de sesenta mil bolívares fuertes mensuales, además de haber contratado a su padre en la oficina de dicha empresa en Margarita.

De igual manera han contratado los “servicios” de asesores por sumas millonarias, y colocado personal sin calificación alguna a manejar operaciones financieras. Sin contar las cuentas de gastos para vehículos, guardaespaldas, gastos de representación y algunos hasta hospedaje en hoteles cinco estrellas, pagados con el patrimonio de las instituciones intervenidas, las cuales no están generando ingresos, por lo que se está afectando el patrimonio que debería emplearse en pagarle al público.

¿Quién desfalca al público? ¿Los dueños de las casas de bolsa que según la propia CNV dejaron instituciones con suficiente patrimonio para responder a los clientes, o los interventores que merman sistemáticamente ese patrimonio? ¿Con qué dinero se financian los programas especiales transmitidos por VTV dedicados exclusivamente al mercado de capitales?

Vale destacar que la mayoría de los clientes de las casas de bolsa intervenidas mantienen lo que se denomina Portafolios; es decir, sus inversiones se encuentran representadas por distintos productos, siendo un portafolio común aquel integrado por dinero en efectivo (colocado a un plazo determinado), acciones, bonos, etc. Estos productos están registrados a su nombre ante el agente de custodio respectivo. Lo cual quiere decir que desde el mismo día en que el cliente adquiere esos papeles, éstos sólo le pertenecen a él. ¿Por qué, entonces, la CNV no ha procedido a devolver esos papeles a sus dueños? ¿Por qué, en cambio, han procedido arbitrariamente a pagar inversiones de la Caja de Ahorro de Fogade, la Guadia Nacional y otros entes del Estado, sin tomar en cuenta ningún orden de prelación en los pagos, y que ni siquiera ancianos o enfermos graves han podido disponer de sus inversiones?

Luego de más de 25 casas de bolsa intervenidas, en su mayoría de forma irregular y arbitraria, el saldo es de centenares de desempleados y de decenas de miles de clientes a los que se ha impedido el acceso a sus inversiones y ahorros. Todo por la sola voluntad de la presidencia de la CNV. (LP)

Fuente: SCH/La Patilla

No hay comentarios.: